Ahí estaba, hermosa como siempre, pero ahora con un vestido de novia blanco, tenía una sonrisa en sus labios, que ansiaba probar en esos momentos, pero lo malo es que no eran míos y nunca los probaría, había perdido la oportunidad de estar con ella hace mucho, pero la desaproveche. Ahora está en el altar con ese tonto de Jonas, si la mujer que había amado toda mi vida, estaba a punto de casarse con otro. Mi Demi me había pedido que fuera su padrino de su boda, me dolia en el alma tener que ser yo, pero no podía decirle que no a mi mejor amiga. Se veía hermosa, con su sonrisa, sus manos sosteniendo el ramo. Dure al menos nueve meses para hacerme la idea que mi mejor amiga, el amor de mi vida, se casaría con otro, Joe Jonas.