Sobreviviendo a la fama (y a una pandemia mundial)

Como todos los días, me levantaba para las malditas pruebas, aunque detesto que se me metan agujas a mi cuerpo mas de 10 veces al día, lo hacia por el mundo, literalmente, además mis padres están enfermos del Covid-19. No es que estuvieran super graves, pero están pasándola mal, como todo el mundo, la única respuesta soy yo, ya que mi organismo es raro, casi tanto como mi mente, en vez de agarrar el virus en mi contra, hace un tipo de reacción, subiendo mis defensas, y no me afecta, el Dr. Johnas Palmer, se esta encargado de la vacuna, al haberse infectado con el Covid, fue uno de los pocos que se volvió inmune, al menos por 3 meses, así que tenemos solo 3 malditos meses para encontrar la sustancia que hace que mi cuerpo reaccione de la manera que lo hace. Aunque paso la mayor parte de mi tiempo en pruebas con muchas malditas agujas, siempre estoy encerrada, haciendo tarea, porque si, aunque estoy en el hospital intentando de salvar el trasero de todo el mundo, el mundo no lo sabe, ya que así lo decidimos, porque, la locura esta a un nivel que me podrían secuestrar, y llevarme a laboratorios, me siento como si tuviera super poderes. Las pruebas son las misma ya me había acostumbrado a las pruebas, me ponen sustancias de todos los colores y sabores, pero gracias a mi cuerpo rarito, mi sistema inmune puede aguantar lo que sea el único problema es mi hambre, dios mío tengo que comer demasiado, aunque creo que es la única ventaja de este sufrimiento, como demasiado y no hay manera que engorde, ya que por alguna razón científica que no se, me pasa, ese si es el sueño de cualquiera, diría que estoy viviendo un sueño pero créanme es mas una pesadilla. Y después la fama llega, no quiero ser famosa, soy alguien que estuvo en el momento y lugar adecuado en el tiempo correcto fue pura suerte, y ahora soy famosa, no puede ser.