Sabía que no era como cualquier chico. Desde que lo vi, una extraña sensación me advirtió que este chico iba a ser un problema en mi vida, que desde ese momento, mi vida iba a ser un infierno, y al fin y al cabo una acaba acostumbrándose.
Pero que pasa cuando la costumbre se vuelve necesitada?
Dos almas completamente distintas pero a la vez iguales, dos caracteres fuertes y con orgullo, pero solo uno, es imprescindible para que el otro vuelva a la normalidad.
Y si te dijera que esta historia de odio puede cambiar?