Nivel de aumento al 1%... Algunos libros, textos y hasta los conjuros más antiguos comienzan con la misma advertencia: "No juegues con fuerzas que no puedes comprender." La ambición humana nunca se sacia, no se conforma con sobrevivir; desea dominar. Se cree el amo de la creación, el rey de la cadena alimenticia, convencido de que todo lo que existe fue hecho para obedecerlo. Siempre busca más, siempre desea ser el que manda... nunca el mandado. Así, hace décadas, un experimento se gestó bajo ese mismo principio: convertir la inocencia en poder, transformar a niños en sujetos capaces de desafiar la naturaleza misma. Se les inyectó Fulgor Nocturno, un compuesto que combinaba la sangre de un demonio antiguo con ADN de bestias mágicas capturadas, y en minutos, sus cuerpos crecieron, sus músculos se endurecieron y sus mentes absorbieron conocimientos imposibles, como si la vida misma se plegara a su voluntad. Lo que comenzó como un registro clínico y frío se convirtió en un infierno: laboratorios consumidos por llamas, cuerpos carbonizados, gritos que jamás se apagarían, y la certeza de que lo que crearon ya no podía ser contenido. Ochenta años después, los ecos de aquel caos no han muerto. Entre escombros y ruinas, una señal anómala ha sido detectada, un llamado que solo los entrenados pueden seguir, y lo que se despertará allí pondrá a prueba todo lo que la humanidad cree conocer: la codicia, la ambición y la violencia nunca se apagan, y los monstruos que nacen de ella aprenden a matar... no por necesidad, sino por puro placer.
Mi nombre es Goorp. Soy una gelatina verde viviente o algo así. No estoy muy seguro aún. No hace mucho que nací aquí en esta extraña y peligrosa isla llena de monstruos. Lo único que quiero ahora es vivir en paz con quienes pueda y evitar a los que procuran matarme.
Tengo todavía una duda: como no sé lo que soy, pienso que quizás yo mismo también pueda resultar siendo una amenaza para mis amigos... No importa. Haré todo lo posible para impedir que así sea. Sinceramente, no es mi intención lastimar a nadie; al menos no a nadie inocente.
Yo no soy esa clase de monstruo... ¡y no quiero serlo!
-----
AVISO: Los hechos y personajes contenidos en esta historia son completamente ficticios. Cualquier parecido con personas o entidades reales es pura coincidencia. Asimismo, el nivel de violencia puede resultar inapropiado para algunas personas. Se recomienda discreción.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional. Para ver una copia de esta licencia, visite: http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/