Soy esa chica que toma un lápiz y un papel y desahoga sus penas en él.
Veo, siento, escucho y soy víctima de cosas inhumanas que pasan a diario, pero, como toda chica llorona al fin, solo oculto mis sentimientos y los demuestro en lo que escribo.
Pero, siempre cada persona tiene su momento donde ve la luz al final del camino, y ahí, justo ahí, veo una pequeña pizca de esperanzas y mi corazón late normalmente. Es ahí, donde veo pajaritos en el aire, la felicidad y las alegrías.
Bienvenidos a mi mundo, donde escribo lo que pienso, lo que la imaginación vomita y lo que mis manos expresan.