
Cuando la persona amada nos falla, creemos que no hay escapatoria del dolor, que nada es suficiente en nuestra vida, y las ganas de seguir adelante desaparecen, siempre habrá algo o alguien que nos ayudara a salir adelante. Dos caminos completamente lejanos, que por obra del destino se cruzan. Las consecuencias de este suceso, son inevitables...All Rights Reserved