El mejor enemigo

Eleanor Albertson creció con los cuentos de hadas que su madre le relataba antes de irse a dormir, sin embargo, maduró y a sus más de veinte años se olvidó de dichos cuentos porque ella no era ninguna mujer que necesitara de ningún príncipe que acudiera en su rescate. Era una princesa moderna que sabía valerse por sí misma.
Harrison Edevane, socio y amigo de su abuelo es un tipo cínico e interesado en relaciones de una sola noche cuya exclusividad o compromisos no existan de por medio, por tanto, es todo lo que Eleanor necesita para demostrarle a su familia que puede tener una relación con alguien y no inventárselas debido a su ajetreado ritmo de vida, aunque a la primera impresión ambos temperamentos chocaron.
Bien dicen que los polos opuestos se atraen y cuando estos polos se juntan, la colisión es atroz, desnudando sus corazones y la necesidad de amarse pese las diferencias descomunales existentes entre ambos y la gran similitud que comparten.