Una obsesión, si era una obsesión la que tenía cierto castaño por ese volátil pelirrojo.
La pared de su habitación estaba repleta de fotos de su amado y eso era lo único que la decoraba junto a una cama pegada a la pared y un armario el cual tenía cierto contenido sospechoso.
-Mi amado Chuuya... Eres realmente hermoso-
-Mi amado Chuuya, no puedes huir de mi. Soy tu amo. con solo un toque te armaré y desarmaré a mi antojo-
-Mi amado Chuuya, nunca escaparas de mi-
-Mi amor por ti es tan grande que llegó a una obsesión... ¿No es lindo?-
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Fanfic de mi otra cuenta, editado y actualizado
Esta historia está llena de cosas que no son aptas para todo publico, se recomienda discreción.
HISTORIA FICTICIA
Incluye maltrato psicológico y físico. Lenguaje fuerte y obseno