Polvorientos y solitarios, a veces curvos en ocasiones, pero en mi caso siempre ligados al mar. Para mí no son parte de la vida, son la vida; cada obstáculo, cada pendiente, rasga el alma y hace que corone en cada cima.
Relatos de suspenso completamente diferentes, en las que se muestra que en ocasiones hay que tenerle mas miedo a los vivos que a los muertos, que hay que ser una buena persona sino la muerte te cobra todo lo malo que hiciste en vida, que si siempre esperamos una señal en la vida a veces puede venir del más allá y que las palabras son tan poderosas que alguien las puede hacer realidad.