Positivo... ¿Quién creía que lo era? Risueño... Jamás se ha visto el rostro. Inocente... No puede creerse así, a él mismo. Qué tal gracioso y platicador... pues no conoce a ése bot y nunca pudo haber sido él. Desde el accidente, ya no se ve como todos afirmaban que era. Siente que está irrumpiendo en un cuerpo ajeno, que su yo pasado es otro ser completamente diferente, a lo que él es ahora. Tal vez haya cambiado... pero seguirá las pistas del accidente y cuando descubra quién le causó todo este daño, lo dará todo por tenerlo en sus manos y hacer que se trague su propia chispa. Hasta entonces, no sabrá quién es realmente. Y aunque no recuerda su verdadero yo, jamás hubiera esperado que un camarada suyo lo apuñalara por la espalda.