Un domingo a la mañana, limpiando a mi caballo llegaron dos personas al lugar, pensando que yo vendía a dos de mis caballos. Ellos tenían un aspecto de maleantes, ropa rota, sucia y una voz muy ronca y ellos me dijeron.....
Tan solo tengo 18 años,pero desde los quince,creó que mi sitio no es la tierra...yo solo quiero volver a casa,cuando creo que vuelve a encarrilarme algo sucede que me saca de mi camino...
Las personas que creo que me ayudan siempre me machacan y dejo de lado a quien no debo...
No se hacer nada bien...mis muñecas están marcadas en forma de auxilio...
Pero él...consiguió sacarme todos los demonios que tenía dentro y devolverme a casa...junto a él.