Es una nueva era, todos han renacido y ahora viven un futuro pacifico, lejano a esas épocas de terror y sangre. Un paraíso por así decirle, bueno, eso seguro era para los demás menos para el joven Senjuro quien a pesar de tener un futuro donde su hermano seguía con vida, el destino se había encargado de castigarle haciéndolo vivir con un sentimiento prohibido en el interior de su pecho.All Rights Reserved