Shoto era un alumno ejemplar, siempre llegaba a clases temprano, entregaba los trabajos a tiempo, era bueno con los profesores. Nunca nadie hubiera imaginado que detrás de ese educado joven había un chico alocado que amaba las fiestas y disfrutaba emborrachandose todos los fines de semana. O eso era hasta que... "¿Que haces tu aquí?" De todas las personas en el mundo, tenía que ser el la persona que lo vio en ese lugar. Estaba jodido, totalmente jodido. ¿Hay algo peor que encontrarte con la persona que más odias en el mundo en un lugar al que nadie puede saber que vas? Oh, claro que había algo peor... Despertar en la misma cama que esa persona con un horrible dolor en la cabeza y las caderas. Eso si que era mucho peor...