Bienvenidos a London, 1940; esto es la Segunda Guerra Mundial.
Alemania quiere apoderarse del mundo, las mujeres comenzaron a usar pantalones, vestidos más cortos, lindas perlas, labios rojos, y un cigarro en la boca. Todos quieren conducir un Ford, hay campos de concentración, Rusia y Estados Unidos son aliados, Winston Churchill es nuestro primer ministro y Jorge VI nuestro rey; este es el mundo ahora.
La gran realeza de Inglaterra... mi hermano mayor, Sherlock Holmes, es un personaje querido y respetado por ellos, pero en lo personal, no me agradan mucho. Conocí a un miembro de la realeza hace poco, un torpe y engreído vizconde. Tewksbury no me agrada en lo absoluto, y estaré en guerra con él toda mi vida, por las siguientes razones:
1- Se entrometió, entorpeció, y distrajo de mi primer plan como detective, el cual consistía en encontrar a mi desaparecida madre.
2- Rompió toda la confianza que había entre nosotros al tenderme una trampa para que me internaran en el "London Royal Boarding School", donde él y todos sus patéticos amigos de la realeza permanecen; a lo que yo, obviamente, siempre me negué, desde el primer minuto en que mis hermanos lo sugirieron.
3- Después de mi ingenioso escape de ese infierno y tres meses de libertad, Tewksbury volvió a ser el responsable de que me atraparan... y ahora estoy en este lugar de nuevo; rodeada de condes, marquesas y niños pijos.
Esto es 1940, y al parecer, siempre vuelvo a London.