Hoy es domingo y despierto a las siete en punto, como es habitual de estos días relajados y bien dormidos, me tomo un momento para despertar, hoy confío en que mi señora traiga el desayuno, en esta ocasión como en tantas otras cierro los ojos y derrepente recuerdo todo, claro y diáfano como las vertientes en los encajonados valles. Recordé lo que soñé que fue el principio de un gran cambio como augurio de lo que acontecería " Quizás y tal vez tu eres un León " es el resumen del breve análisis del episodio onírico de aquella madrugada. Entonces desde aquel día ya no tenía mas miedo. Mi situación había cambiado, yo estaba cambiando, como un animal que va por primera vez a la caza. Los antiguos temores, vicios y sin sabores seguirían ahí, pero desde ahora todo es diferente. Alguien habitaba en mí. sentía en mi interior como una especia de habitación que ya no estaba oculta, la ira que antes no existía ahora se colaba exacta en mi conducta y en las palabras.