He tenido constantes pesadillas que se han repetido a lo largo de mi monótona y corta vida. A pesar de que estoy próxima a cumplir dieciocho años para independizarme, hoy tendré que recorrer, una última vez, aquél camino que me llevará a ese odiado hospital al que he acudido desde que tengo memoria.
Pero por un accidente, todo se me volteó de cabeza y terminé, sin querer, viviendo bajo el lecho de una familia vampira y siendo la mascota de alguien que dice ser mi dueño.
Tras la llegada de los mellizos todo parece ser mejor hasta que personas del pasado de Megan aparecen en su vida para atormentarla, problemas nuevos, cazadores asesinando a seres sobrenaturales, los que eran enemigos ahora son aliados, todo por el bien de ellos.