Siempre he sido muy insegura, en mi físico, desde mi figura hasta la forma de mis uñas, mi estatura, o el tono de voz que debo tener frente a las personas, siempre he tenido la sensación de que si la gente conoce mi verdadero yo entonces ellos me odiarian, o me mirarían mal.
Esta inseguridad me ha dado un regalo, uno del cual no es fácil devolverlo, lo llaman depresión.
Pero lo que me pone mas mal es que la inseguridad que me hace daño, que me hace sentir que me muero no es la mía, es de alguien más.