Olas danzantes, susurrantes al ver a semejante ser. La luna en el cielo, mirando orgullosa a su hija. Una existencia que no es humana ni diosa.
Confundida, errante, temerosa, ansiosa, pero al mismo tiempo, orgullosa, valiente, fuerte, determinada.
Lidiar con una guerra divina, gobernar sobre todos los dioses, pelear y vencer, amar y ser herida, una pesada carga sobre sus hombros. A sus 19 años, la joven camina con la frente en alto aun estando herida.
¿Qué obstáculos tiene la vida? ¿Qué estás dispuesta a perder? ¿Quién eres? Humana o diosa.
"A la mierda con eso" se escucho una voz en medio de la nada.