Ver su rostro me causaba el más puro placer, su sonrisa era semejante a los destellos de luz y en sus ojos podría reflejar mi vida entera. No sabía en qué momento, no tenía idea del porqué pero era mío. Él era todo lo que alguien podría pedirle a la vida, un lindo rostro con un cuerpo envidiable; comprensión, confianza, empatía y sobre todo amor; sus modales iban a la perfección con sus facciones tan bajadas del cielo.
Jamás había el más mínimo disgusto, simplemente él y yo estábamos destinados a ser y a estar, a ser almas gemelas. Me ama de una manera en la que ni yo sé amarme.
Ese era mi Amneris, haciendo mi vida menos patética, siempre.
Entonces ahí estaba él, siendo tan tímido con las chicas y como todo un rebelde frente a sus amigos, lleno de inseguridades y miedos, tratando de librarse día a día de esa gran sombra que conlleva pero sin perder el gran toque que lo caracteriza, así es Emnesto.
Siempre tuve todo con Amneris pero nunca pude mantener mi mente en orden cuando Emnesto estaba a mi paso.
Un verdadero contraste, cautivador y tentativo; así son los hermanos Bianchi.
Cuando Jana, una talentosa y apasionada arqueóloga, es elegida para un proyecto de exploración por el gobierno, no imagina que esta misión cambiará su vida para siempre cuando conoce al comandante Maximilian Hofmann; el prometido de la mejor amiga de Jana, por más que intenten evitarlo la atracción se vuelve cada vez más insoportable entre ellos, mientras se embarcan en una peligrosa expedición que los hará vivir una aventura llena de mentiras, secretos y erotismo. ¿Logrará Jana evitar mezclar sus sentimientos y su deseo?