TE AMO dos simples palabras que hicieron que mi corazón volviera a latir, después de tanto tiempo...lo sigo amando como el primer día que se lo confesé, lo amo y lo amare, hasta que llegue mi muerte, lo amare, no importa cuanto tiempo pase yo se que el esta a mi lado, en todos los sentidos.
Despierto y me siento en la cama, otra vez fue un sueño, pero se veía tan real.
Mi madre se despierta y me mira preocupada, como cada vez que despierto, se que quiere lo mejor para mi, pero el estar en un hospital no lo mejora.
-Tranquila si?- asiento con la cabeza y me recuesto otra vez, pero en cuanto lo hago, miles de preguntas se formulan en mi cabeza, ¿Algún día lo volveré a ver?, ¿Y si el destino no quiere reunirnos?, ¿Le habrá pasado algo?, así continuo pensando y formulando muchas preguntas. Hasta que siento que alguien toma mi mano y la acaricia con su pulgar, se que es el, solía hacer eso, pero ahora tal vez solo sea un producto de mi mente, así que volteo y de repente el aire no llega a mis pulmones, volteo a ver a mi madre y ella tiene los ojos cristalizados y asiente, dándome a entender que el en verdad esta aquí y que no alucino...esta aquí y conmigo, después de 3 años, al fin lo veo...
Jae-ji siempre había tenido el control. Era la mejor en todo y nadie se atrevía a desafiarla... hasta que llegó Seulgi.
Lo que comenzó como un intento de dominarla se convirtió en su mayor derrota: en privado, era Seulgi quien tenía el control, y Jae-ji no solo lo aceptaba... lo adoraba. Entre celos, provocaciones y un juego de poder inesperado, Jae-ji descubrirá que ceder nunca estuvo en sus planes, pero con Seulgi, tal vez siempre estuvo destinado a suceder.