Hinata Shoyo abandono el voleibol por diferentes motivos, pero quería seguir divirtiéndose y siendo activo tal y como lo ha Sido durante toda su vida. Entró al equipo de animadores del Karasuno, resulta que su pequeño cuerpo, facilidad para saltar y flexibilidad lo hacen destacar en esta disciplina. Un día van al partido del Karasuno contra el Inarizaki, está sumamente feliz, podrá ver a su novio jugando como siempre. Mucha suerte Tobio -dijo con las mejillas rojas y le iba a dar un beso al azabache- Pero el más alto lo ignoro, estaba pensando en el odioso Miya Atsumu. El partido lo ganaron los visitantes de Inarizaki, cuando hinata iba a acompañar a su pareja, pero este estaba tan iracundo por haber perdido, que se desquitó con él NO ME MOLESTES Y VE A SALTAR Y SONREÍR A OTRA PARTE, SOLO PARA ESO SIRVES, SI SIGUIERAS JUGANDO NADA DE ESTO HABRÍA PASADO -le grito y se fue molesto- Hinata quedó pasmado por la manera en que le había gritado y cuando se dirigía a los baños a llorar, choco contra algo o más bien alguien. Oh pero si eres el noviecito de Tobio-kun -sonrió, pero al verlo con sus ojos llenos de lágrimas, dejo de sonreír- no se que te paso, pero no debes ir a llorar a cualquier parte, después se van a burlar de tí -lo rodeo con sus brazos y el pequeño se echó a llorar en el pecho del más grande llenando su camisa de mocos y lágrimas- Atsumu no era de las personas, que sentía empatía por los demás, pero él había visto a ese pequeño rayo de sol en el equipo de animadores, saltando y brillando, no entendía que había pasado, pero su instinto le decía que debía cuidar a ese pequeño.