Las bocas se movían, los autos pasaban, la música inundaba la sala.
Siempre se pregunto cómo era esa música que su padre, hermano y amigos tanto disfrutaban, como eran sus voces...pero especialmente se preguntaba, ¿Cómo será su voz? La de aquel chico.
Tampoco sabía cómo era su propia voz, pero la nombró:
La Voz del Silencio.
Era inevitable después de olvidar y perder todos los sonidos.
La imagen de portada no me pertenece, créditos a su respectivo autor.
Los personajes en los que se basa este fanfic no me pertenecen, créditos a su respectivo autor.