Liot, el último de los Elfos, que fue traicionado y perseguido por los humanos, se encuentra acompañado de Nia, una Bella humana con una edad aparente a la suya.
Teniendo diferente temperamento, se encuentran con la sorpresa de que se llevan bastante bien: Liot un chico de pocas palabras, frio y con un aire de queminportismo; Nia, una chica tierna, directa y con un aire protector.
Después de pasar un tiempo juntos, Liot decide ayudar a Nia a encontrar a su familia aunque eso signifique tener que volver a relacionarse con humanos. Aunque nuestro protagonista se lleva una gran sorpresa al encontrar finalmente a la familia de Nia, decide quedarse a su lado para protegerla de tal tribu.
Ojalá toda la historia fuera feliz de principio a fin.