Basta con que le des una rosa negra a uno de los trabajadores para que acepten pasar la noche contigo. Nadie sabe la identidad del otro, ni siquiera en el acto sexual. Un simple nombre clave es lo que llegas a conocer y si tienes suerte puede que recuerdes el color de iris de tu acompañante. Pero por favor... Por lo que más quieras... No te quites la venda y mucho menos... Te enamores de nadie. * Historia originalmente mía * Prohibida su copia total o parcial * Historia Yaoi * Contenido +18
10 parts