-¡Mi vida es un desastre!-. Exclamó Alexia mientras intentaba arrancar su moto que se había quedado estancada en un bache a plena luz del día. Sin contar lo que le había ocurrido en la mañana sólo le faltaba esto; que el chico que tanto se burlaba de ella en la secundaria y que por alguna desconocida y extraña razón nunca le prestó atención, la viera en semejante situación.
Leo, ese chico irresistible y deseable para todas, se aprovechaba de eso para obtener lo que quisiera, estaba ahí parado frente a ella, con esa sonrisa ladina que tanto odiaba Alexia (porque era irresistible) sin más reparos, se bajó del carro y se apoyó en el capó del mismo. Mirándola a los ojos y con ese tono sarcástico con el que siempre hablaba le dijo: -¡Hola Alex!, que gusto que nos hayamos vuelto a topar...-
...
¿Qué pasará entre Alexia y Leo?
Puede ser que el tiempo que han pasado sin verse les juegue a favor o... los termine de alejar cada vez más y más...
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...