¿Es posible enamorarse de alguien sin haberlo tocado? ¿Con tan solo mirarlo? ¿Con tan solo cruzar un par de palabra?
Palabras que para mí eran importantes, mientras que para él eran simples. Palabras que a mí me hacían tener infinidad de emociones y a para él era indiferente; y así era él: Un chico frío, realmente sexy, con una fila de chicas detrás de él, babeandole su espalda, bien formada a causa del ejercicio.
Y yo una chica inocente, a la par de él, alegre, muy risueña, muy cariñosa y enamoradisa, para mí todo era alegría pura, a pesar de que me sintiese mal, siempre sonreía, tengo a mis mejores amigos, y una madre y un padre a quienes, no les podía mentir, no era la chica más hermosa y con un buen cuerpo; pero tenngo sentimientos, que creí que con eso me bastaba, nunca en mi vida creí que me llegaría a sentir así, hasta que él llego.
El creía que nunca caería, y lo hizo, pero fue muy tarde, me destrozo, fue duro conmigo. Y será mi desición si quedarme allí o irme.
Una noche en Las Vegas cambia la vida de Nailea, cuando despierta casada con Alex Milani, un carismático piloto de Fórmula 1.
Lo que comienza como una farsa para evitar un escándalo mediático pronto se convierte en un torbellino de emociones, atracción y secretos.
Entre el brillo de los eventos de alto perfil y las sombras del pasado, Nailea y Alex deberán enfrentarse a sus diferencias y a una conexión inesperada que podría unirlos... o romperlos para siempre.