Hazel era muy ingenua. La tipica hija de buena familia buenos amigos y bien educada. Pero ahora, que los errores han sido cometidos, debe adaptarse a una nueva vida donde reina la oscuridad y las costumbres de esos mitológicos chupasangre. Mikey vivía un día a la vez. De la universidad a su casa y viceversa hasta que la nueva estudiante llama su atención. Sus ojos y frialdad revivian esa parte curiosa de su ser que creyó sepultada con las pérdidas del pasado. Dos cuerpos. Biológicamente incompatibles. Energeticamente iguales ¿cómo acabarán? [TERMINADA]