Verlo, significaba dolor, peligro, adicción.
Y aun así, yo jamás fuí capaz de poder dejarlo ir.
Mi mente lo seguía, me atormentaba. Y cada día me recordaba que no estaba.
¿No era eso mejor?
¿Qué estuviese fuera de mi vida?
¿Qué nunca hubiese vuelto a ella?
Sabía que lo mejor había sido que huyera, pero me negaba a querer que fuese así.
No sabía nada, no entendía nada.
Y no quería hacerlo.
Pero, el destino me atrapo, me dejo en claro que todo lo que yo alguna vez conocí, no era más que una mentira, para poder vivir.
Una mentira de la que jamás debí salir.
-Aveces pienso,¿que hice para merecer esto?,supongo que el destino estaba escrito para mi...no lo se,supongo que nunca podre saber si hice bien o hice mal...todo lo que queria era recuperar mi vida...