¿Has pasado por momentos en los que no sabes qué elegir?
Si dices sí, puede que te beneficie a tí pero, en cambio, perjudique al resto. Si dices no, puede que hayas elegido la mejor opción porque tratas de evitar el problema pero, a la vez, te quedas con la incertidumbre de saber qué hubiera pasado si hubieras dicho sí. Pues así estaba yo en ese preciso momento, sin saber qué decir.
El tiempo corría en mi contra, ya que todos me presionaban para que diera una respuesta porque sabían que según la respuesta que les diese les repercutiría de una manera u otra. Me parecía muy egoísta por su parte, que se interesaran por mi respuesta sólo porque les afectaba y no porque se preocupaban por mí.
Había pasado ya mucho tiempo desde que me habían hecho la pregunta, y nunca la había tenido tan claro como ahora. Sabía que diese la que respuesta que diese sería perjudicial para uno o beneficiosa para otros. Todo estaba listo. Iba a dar la respuesta cuando, de repente, la vi a ella. No sé si fue ella o no, pero me hizo cambiar de respuesta. Y dije: "_ _"
Por cierto, me llamo Carlos y tengo 18 años.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...