Peeta Mellark estaba entusiasmado de que su primo Gale viniera a vivir con él y fuera a la universidad. Cuando había llamado para preguntarle si podía traer a su amiga Katniss con él, Peeta no se preocupó. Peeta había escuchado sobre esta amiga misteriosa desde que eran niños y parecía como si ya la conociera. No obstante, nada lo prepararía para verla saltar del Jeep de Gale. Katniss no sólo era la chica más hermosa que alguna vez había visto, sino que había algo acerca de ella que a los segundos de conocerla, hizo a Peeta querer protegerla, y hacerla suya. Qué lástima que Gale hubiera hecho un punto al recordarle a Peeta diariamente que él estaba saliendo con ella y que estaba completamente fuera de los límites.