Tras la muerte de su progenitor, Mateo se convirtió en líder, tomando el lugar de su padre para dirigir a los Blood, una de las bandas criminales más peligrosas del país.
Homicidas de pies a cabeza. No sienten remordimiento, crueles e inhumanos con todo aquel que osaba entrometerse en su camino.
Palacios poseía los conocimientos suficientes como para saber exactamente en qué momento y de qué forma actuar. A parte de inteligencia, disponía de habilidades que solamente demostraban lo innegable: Mateo nació para liderar.
Desde que él era un niño, su padre le enseñó a imponer sumisión, respeto y miedo mediante actos que llegaban a ser escalofriantes. El objetivo era asegurar su futuro como líder.
Todo iba como lo planeado, hasta que Mateo se encontró con algo que lo dejó fuera de lugar, empeorando aún más su humor.
Keyla Becker.
La hija del jefe de policía. Una mujer de veinte años que, a pesar de que su padre "formaba parte" de la ley, ella vivía envuelta en el mundo criminal. Le gustaba.
Arnold, su padre, conocía las habilidades que ella poseía después de haber sido criada por su madre. Esa es la razón por la cual Arnold decidió que era momento de poner en marcha su plan. Un plan que en el cual lleva años trabajando, y él no podía hacer nada más que mantener los ojos de la ley alejados de Keyla para que ella pudiera actuar por él.
Era una mujer ingeniosa. A cualquier inconveniente le sabía sacar el beneficio, no era una simple habilidad, era un poder que podía hacerla llegar muy lejos. Siempre supo como salir ganando, y definitivamente, siempre lo conseguía.
Estaba capacitada tanto física como mentalmente para todo, y seguramente esa era la razón por la cual el miedo que le tenía a Mateo era nulo.
Si ninguno temía al otro, ¿qué iba a pasar en cuanto se enfrentaran? ¿Quién ganaría? ¿Mateo? ¿Keyla? ¿Ninguno? ¿O ambos?
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Iniciada: 2/04/2021
Finalizada: -
Lenguaje NO arg
Han pasado cerca de 7 años después de que ambos miembros de la realeza se vieran por última vez debido a sus deberes reales y prometieron volver a encontrarse, pero.... ¿Será como lo habían planeado?