Al nacer tenemos un camino por el que debemos caminar durante nuestra vida sintiendo el dolor y la tranquilidad que hay en este, haciéndonos madurar aprendiendo de nuestros errores y malas decisiones, así forjando lo que, en el futuro, seria nuestro verdadero yo... Sin embargo, hay personas que no tuvieron la misma suerte que nosotros al nacer en caminos llenos de espinas que les hacen querer rendirse y dejar todo atrás para encontrar al menos un poco de tranquilidad... Pero hay quienes siguen avanzando a pesar de todo el dolor que sientan, llevando en su espalda el deseo de hallar la verdadera felicidad que tanto escasea en ese camino que les toco recorrer... Con la voluntad de un soldado continúan caminando por esos caminos llenos de sangre y muerte para alcanzar lo que hay al final de todo... El objetivo lejano que anhelan en los más profundo de sus corazones...