En 1608, una vecina del pueblo de Zugarramurdi llama preocupada a la Santa Inquisición Española. En su denuncia, dice haber presenciado extraños sucesos y alega la existencia de Akelarres en el lugar.
Cuando Louis Tomlinson, inquisidor por la Gracia de Dios, llega al pueblo, lo último que se espera es encontrarse con , probablemente, el muchacho más hermoso que sus ojos azules hayan visto.
Sin embargo, está ahí por un trabajo.
Ante todo, el deber para con Dios siempre debe ser lo más importante...
¿Verdad?
Un desafortunado incidente a los diez años de edad, fue el mismo que llevó a Louis a conocer a aquel pequeño y extraño niño de ojos verdes que le ayudó a escapar del frondoso bosque en el cual se había perdido, pero aquella fue también la ultima vez que lo vio.
Enfrentándose a la época de la inquisición en su plenitud, Louis tendrá que encontrar la forma de devolver un gran favor cuando aquel niño que una vez se encontró, regrese frente a él convertido en un joven, y acusado de una de las peores etiquetas para aquella época: brujería.
''Él es un silbido del viento. Una pluma sobre la brisa. Una rima del arroyo. Él es, el reflejo del sol sobre el mar. Él es una lluvia suave de verano, que cae dulcemente sobre los árboles... y lo amo.''