El silencio de la serpiente.

El infame señor oscuro Voldemort secuestró al hijo menor de los Potter con el objetivo de...
... ¿mimarlo?.

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La familia de los Potter tuvo mellizos, y una profecía decidió que sólo uno de los dos era especial, destinado a derrotar al mago oscuro más fuerte. Y el día en que Voldemort atacó a los Potter dejó una marca de rayo en la frente de uno de los bebés.

Tal vez fue el verdadero destino, o solo la pura suerte, pero ese día nadie perdió la vida. Voldemort menospreció las barreras de los Potters y aunque estuvo por matar a uno de los bebés, tuvo que huir.

Lo que sí ocurrió fue que el hijo mayor, Daniel, fue el elegido para cumplir con esa profecía.

Los adultos determinaron que una vida donde el peligro acechaba no era algo que el hijo menor, ajeno de todo, mereciera vivir. Así fue como se decidió que el mayor fuese criado por sus padres, mientras el menor fue enviado con sus tíos, con la esperanza de mantenerlo alejado del peligro.

Harry siempre fue un niño silencioso, tartamudeaba, tal vez por eso nadie a su alrededor notó los moretones en su cuerpo, o tal vez asumieron que era culpa suya de alguna manera.

Pero un día alguien tocó a su puerta.

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Notas:
1. Harry NO es el niño que vivió.
2. Voldemort solo tiene 2 horrocruxes.
3. James y Lily solo son malos padres.
4. Múltiples puntos de vista.