A un siglo de Distancia

Las personas habitan tranquilas el condado de los atardeceres de ensueño en el año 1643, año de su fundación.
Años después memorias almacenadas en un cofre resguardan sentimientos empedernidos, suspiros resbaladizos y pensamientos con la firma y sello de sus autores.

Los días lluviosos eran sus favoritos, el aroma a petricor rodeando la zona, mamá ordenando la ropa limpia, papá leyendo un libro en la cocina mientras bebe un té, su hermana pintando el paisaje que su imaginación divisa en colores de ensueño, campos de trigo y manos enlazadas.
Si, la lluvia era también su melodía favorita. O lo era hasta el día en que lo escuchó reír a él.

El chico de cabello color alba, ojos chocolatozos como los trozos en sus galletas favoritas y carcajadas suaves como los pétalos de flor de durazno pero estruendosas como la llovizna torrencial de las fechas de diciembre.

El chico almendra de ojos centellantes, relatos furtivos, manos inquietas, y el perfume natural de las rosas floreciendo desde sus poros.

Ambos destinados a conocerse, más no se sabe si a comprenderse.

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ׅ ࣪𓏲ּ Contenido homosexual, no te gusta no lo leas.

ׅ ࣪𓏲ּ Ésto será terminado con o sin apoyo, después de todo es un pasatiempo, ojalá me yome el tiempo que me tome porque soy perezosa.

ׅ ࣪𓏲ּ La obra es original y no busca ofender a los personajes, es solo entretenimiento y pura ficción. Nada es real o afirma serlo.

Ojalá disfrutes la lectura!.