La peligrosa y salvaje ciudad de Brooklyn. Algunas voces tristes cantaban sus historias. Varias decían haber encontrado el amor cuando sólo es de una sola noche. Los malás afortunados reían de la miseria de los demás mientras los trabajadores dejaban sus pocas fuerzas en cobrar una miseria. Son las dos de la mañana. Las agentes de policía Talia y Lauren seguían de patrulla cuando reciben una llamada: había un asesinato.