Hay personas que crecen en mentiras, otros son capaces de crearlas. Pero existe un mínimo porcentaje de ser capaz de hacer ambas, o mejor aún decifrarlas. Bueno, yo pertenezco a ese pequeño porcentaje aunque todo el mundo solo me describe como un mentiroso patológico, un mitómano, tanto así que decidieron que lo mejor para mi era el psiquiátrico Rederfild. Creyeron que era lo mejor para mi, incluso por un segundo yo también, pero basto de tan solo unas horas junto a Alessia Portland para ver que nada era lo que parecía, e incluso una sola persona, o tal vez varias, podía cargar con tantos secretos capaces de destruir a cualquiera pero que solo la destruia a ella condenandola a un destino incierto.All Rights Reserved
1 part