Para que dos personas crucen la mirada han de coincidir tanto en espacio, como en tiempo, esto implica que se han de cruzar en la misma época, país, ciudad, calle... Y mirada. La nieve cubre un invernal Madrid, mientras el haz del caprichoso e impredecible destino hace que Aiden y Nora se crucen, Observa lo curioso que resulta que dos personas se conozcan de esta forma. Todos los derechos reservados al autor de la obra. Copyright 2016.