Aria Evans es un chica de 17 años, vive en un mundo lleno de lujos y asiste al Constante; la preparatoria para todos aquellos herederos a empresas grandes y herederos a fortunas.
Ella no era una chica que saliera de su zona de confort, no iba más allá que no fuesen sus dos mejores amigas; Marisa Clark y Stefanie Collins.
Mientras Aria y sus dos mejores amigas pasaban el rato, tres chicos nuevos estarían llegando a la ciudad y lo que esto al principio no parecía malo, varias líneas se desecadenan.
El amor por primera vez surge, los sentimientos, la pasión, los engaños, las mentiras, la única manera de tener el control.
Pero no bastaría porque nuevos integrantes se unirian ese mismo año, provocando un gran desorden en la vida de esta chica.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...