Melody es una joven moderna y extrovertida a la que le encanta salir con sus peculiares amigos. Aunque no es el trabajo de sus sueños, se gana la vida como camarera en el restaurante del hotel Villa Aguamarina de Madrid. Un día, a la salida de una fiesta en la que ella ha servido el catering a los invitados, ve que un coche se acerca peligrosamente a un hombre que está en la acera hablando por el móvil. Melody no lo piensa dos veces y va en su ayuda. Sin saberlo, acaba de evitar el atropello de Dinmukhamed, el hijo del dueño del hotel. Serio, clásico, reservado y algo mayor que ella, en un principio se enfada al verse rodando por los suelos, pero minutos después se queda prendado con la muchacha que le ha salvado la vida. A partir de ese instante, el destino, y más concretamente Dinmukhamed Kanatuly Kudaibergen, harán todo lo posible para que algo mágico suceda entre ellos. ¿Estará Melody preparada para lo que le depara el futuro? Si crees en los flechazos y no quieres dejar de sonreír, no te puedes perder un café con sal, un relato que te enamorará.