Geminus Cupido

Desde la antigüedad Cupido es conocido como el Dios romano del deseo amoroso, pero lo que la gente desconoce de él es su legado.

Tras casarse con su amada Psique trajeron al mundo a la pequeña Geminus. Desde el momento en el que la pequeña derramó su primera lágrima siendo esta de llanto quedó reflejada la herencia de su abuela - la Diosa Venus -, la gran belleza reflejada en la pequeña la hacía resaltar entre los Dioses allá donde fuera y por supuesto, entre los hijos de estos.

Conforme la pequeña iba creciendo, el parentesco con su padre salió a la luz. Realizaba diversas travesuras, especialmente a los descendientes de los Dioses que debido a su belleza y digamos que su descendencia quedaban enamorados de ella y no podían ir en su contra.

Pasaron los años y la pequeña se convirtió en una bella muchacha con ganas de explorar y no solo su mundo, ella estaba al tanto del mundo de los mortales ya que su padre bajaba mucho por allí.

Cuanto más crecía, mayor era su curiosidad por el mundo de los mortales y su comportamiento, para ella los mortales eran extraños por sus maneras de ser o actuar. Aún así, ella quería bajar - algo que por supuesto le estaba prohibido, al menos aún -.

Pero el destino es caprichoso y los Dioses lo son aún más.

Portada: @M_Blake02- 🤎