Nunca pensó que su vida tomaría un rumbo inesperado y tendría que mudarse a una nueva ciudad. Una nueva temporada comenzaba para ella y se estancó en su inseguridad y sus miedos. Su abuela, que entendía que todo era un plan de Dios la llevó a la iglesia. Héctor, un joven cristiano, pero algo intenso en su personalidad acompañará a Laura en este nuevo proceso de cambiar su vida y como consecuencia, sin saberlo, también cambiaría la de él.