- Escucha bien, -Suspiró. -Sé que esta ciudad está llena de criminales fugitivos, aun así, no puedes hacer lo que se te venga en gana. Según la ley de Hidden Town, solo existen dos castigos, el exilio y la muerte. -Su rostro serio daba a entender que no jugaba, sin embargo, solo obtuvo un asentimiento cómo respuesta. - Bien. -Y sin algún tipo de despedida emprendió su camino a quién sabe dónde. - ¡Espera! -Gritó haciendo que detuviera sus pasos. -Ten cuidado. Y por favor no confíes en nadie, Hidden Town no es como parece.جميع الحقوق محفوظة
- Escucha bien, -Suspiró. -Sé que esta ciudad está llena de criminales fugitivos, aun así, no puedes hacer lo que se te venga en gana. Según la ley de Hidden Town, solo existen dos castigos, el exilio y la muerte. -Su rostro serio daba a entender que no jugaba, sin embargo, solo obtuvo un asentimiento cómo respuesta. - Bien. -Y sin algún tipo de despedida emprendió su camino a quién sabe dónde. - ¡Espera! -Gritó haciendo que detuviera sus pasos. -Ten cuidado. Y por favor no confíes en nadie, Hidden Town no es como parece.