ángel

Me llamo Celeste, tengo 21 años y odio la vida, desde chicos te dicen que la vida es una fiesta, que hay que valorar cada segundo, pero yo no pienso igual, pienso que la vida es una m*****.
Sufrimos desde el día 1, vivimos Para complacer a la gente, y después morimos solos. Qué ironía la vida.
Los días tienen Sólo 24 horas, 8 horas se supone que dormimos, y las otras 16 horas nos pasamos complaciendo a todo el mundo que nos rodea, a los que queremos, porque no nos gusta verlos tristes.
Hoy quiero contarles la historia de mi vida pero sólo desde aquel día que se derrumbó todo.
Siempre pensaba que la tristeza más alta que podría haber tenido es que me traten mal que no me hablen, el bullying.
La tristeza es otra cosa, la tristeza es no puede respirar de tanto llorar.
La tristeza es saber que en un abrir y cerrar de ojos se te va lo que vos más querés. Saber que en un abrir y cerrar de ojos te quedas solo.
Qué tenés todo el tiempo gente a tu alrededor pero no te sirve, Porque esa gente que está a tu alrededor no reemplaza esa persona que se te fue. Porque sabes qué darías tu propia vida por volver a ver a esa persona. Porque está vacío tanto por dentro, como por fuera.
Cuando se te va una persona, se te muere el alma, te morís por dentro y te levantas cada día pensando que tenés que vivir para no ser egoísta con el otro.
Porque si hoy elegir entre vivir salir de este mundo de m*****, elijo salir.