El día que te conocí fue extraño, diría que desde ahí comenzó todo pero, comenzó mucho antes de ese extraño día, comenzó cuando éramos pequeños y aún no sabíamos que nos deparaba el destino, solo teníamos seis y yo sabia que de alguna manera nuestro destino estaba conectado, es cursi y ridículo pero el lo que provocas en mi, mi querido dobe.
Ahora que te encontré no pienso soltarte como años atrás cuando más me necesitadas y te convertiste en el chico sonriente y torpe a uno tan reservado, frío y marginado, el cuál dejo atrás a sus amigos y familiares, que ya no sonreía como los mil soles y solo tenía una cara sería.
Se que en parte es mi culpa por dejarte solo en tu sufrimiento pero pienso arreglarlo como años atrás tú lo hiciste por mí, ya no serás el chico solitario que aún así me cautiva con solo verme a los ojos y ver qué aún hay esperanza para que haya vuelvas a tener esas sonrisas y ese brillo en los zafiros que tienes por ojos y pienso ser yo el que los traiga de vuelta y no ese mapache que siempre te hostiga.
Así que esa es mi misión devolver el brillo a ese sol y alejar al mapache de ti, te diría que me lo hicieras fácil pero ese no es tu estilo ni aún siendo el chico de mil soles me la dejabas fácil ahora es más complicado, pro también tengo ayuda de nuestros amigos, créeme volverás a ser tu o me dejó de llamar: Sasuke Uchiha.