Todo comenzó con la inocencia y curiosidad de Atsushi.
Cuando un hombre de traje negro, ojos rojos y aspecto cansado se sienta junto a él en la banca del parque, comenzando a murmurar lo harto que está del mundo, lo triste que es, como esperaba cruzarse con un alma dulce y bondadosa antes de su muerte. Claramente, el inocente Nakajima intenta consolarlo diciéndole palabras alentadoras, hasta que logra estabilizarlo. El hombre, posiblemente conmovido; le regala un raro libro de color negro, con dos iniciales de color plateado en una de las esquinas.
"Fuiste tan amable y comprensivo conmigo. Eres una alma bondadosa, un alma buena. Lo único que puedo hacer por ti es regalarte mi mayor tesoro. Es mi agradecimiento."
"No es necesario, señor. Con ayudarlo me basta. No tiene q..."
"Oh, vamos. Por favor, acepta la última petición de este viejo, además este libro no es un libro cualquiera, puede concederte tu mayor deseo, sólo pronunciando las palabras adecuadas."
El joven, quien no entendía nada, aceptó el libro entre sus manos. El hombre abrió una página con letras más brillantes que el resto y le mostró, lo que, a su parecer podría ser "un poema" en un idioma que no entendía. Le dijo que tendría que decir aquello en voz alta, en una habitación con luz tenue.
En un abrir y cerrar de ojos, ya no había rastros de ese hombre, solamente aquél libro extraño.
Atsushi, se llevaría la peor sorpresa de su vida al saber que las palabras que profesó invocarían a dos temibles demonios, los cuales estaban dispuestos a cumplir sus deseos, a cambio de tener su alma para toda la eternidad. Y lo peor de todo, o tal vez la cereza del postre para aquellos seres: su amigo, quien a la vez era su compañero de piso, Chuuya Nakahara, se verá envuelto en aquella catástrofe de demonios, deseos y almas robadas.
"Podemos cumplir cualquier deseo, aunque, te aconsejo que pidas una muerte con glamour, o buenas ideas de cómo poder suicidarte."
Becky
Encantadora, cautivadora, seductora, y una asesina a sangre fría.
Pero me casé con la Pakhan de la Bratva rusa de todos modos.
Tuve que hacerlo. Era parte del trato.
Ahora, estoy fingiendo la felicidad conyugal, mientras tiemblo de miedo,
Y no puedo esperar a estar fuera de las garras de esta mujer despiadada.
Freen
Consigo todo lo que deseo.
Y quiero a esta pequeña manipuladora perfectamente imperfecta.
La forma en que puede engañar a cualquiera haciéndole creer que está locamente enamorada de mí, solo me hace desearla aún más.
Ella aún no lo sabe, pero no la voy a dejar ir.
El trato - se cancela.
Freen G!p
Solo es una adaptación, si es reportada se tendrá que eliminar.