Alan había dejado de ser un aprendiz del maestro de la quinta sección del club a ser de los dominantes más codiciados. Zaida, quien ya tenía un crush con el misterioso chico, decide adentrarse en su mundo con un unico objetivo en mente: Enamorarlo. El dominante falla en la tarea de dominarse a sí mismo y a sus sentimientos con respecto a ella. "Si no eres capaz de dominarte a ti mismo... Entonces no lo intentes con otra persona."