The Life is a Game

Una madre ausente la mayor parte del tiempo, una gran deuda que pagar, un mejor amigo que oculta sentimientos, el nuevo estudiante transferido con solo un defecto a la vista: ignora a todo el mundo. ¿Tal vez esconde algo?

Giselle, una chica gamer de 16 años que, si se lo preguntas a ella, los videojuegos son lo mejor que hay, es la protagonista de esta historia la cual se enfrenta a distintos problemas que comienzan a surgir en su vida personal después de que, a escondidas, compra un videojuego de realidad virtual el cual se vuelve su adicción. ¿Quizás sea por Mat? Aquel chico que conoció dentro de él.
Dentro de ella, comienza a nacer un sentimiento por él, el cual florece al avanzar la trama. Lo que no se esperaba para nada, era la identidad de la persona detrás de ese personaje del videojuego. ¿Quién lo diría?

Todo iba de maravilla y entonces, comenzó.
Giselle recibe una carta por parte del banco con un aviso de embargo por una antigua deuda que no podía pagar e intenta ganar dinero por sus propios medios jugando aquel videojuego en el cual, si ganaba, recibiría una recompensa y con ella, no solo pagaría la deuda, sino que ella y su familia no tendrían que preocuparse nunca más por el dinero.
Todo se complica cuando un hacker comienza a causar estragos en la ciudad con el único objetivo de volver a hacer el mejor jugador de aquel videojuego online dónde probablemente cometiese fraude para ganar.

El mismo comienza a borrar el juego poco a poco dándole un tiempo limitado a sus jugadores para enfrentarse a él ofreciéndoles la oportunidad de evitar su objetivo.
Lo que no se esperaba, era que sus planes se verían frustrados por nuestros dos protagonistas quienes deciden formar un equipo y enfrentarse a su enemigo para acabar con él de una vez.

Terminan poniéndole una trampa que los lleva a saber su identidad secreta resultando ser la persona que menos esperaban.

¿Te atreves a leerla?