Sentí con el tacto del rostro de mi amada y sonreí, sus lágrimas bajaban por mis manos, respiraba fuerte y su corazón estaba acelerado. ❝No te preocupes mi amor, todo saldrá bien, al menos así dejaré de ver en blanco y negro. Podré disfrutar de ver tus bellos ojos y tu sonrisa.❞ Tomó mi mano y con delicadeza se acomodó sobre mi pecho, se había relajado... Aunque, yo no lo estaba. ☂ Kakyoin Noriaki x LectoraAll Rights Reserved