Brittany y Santana están en su quinto año como novias, desde el último año de la preparatoria.
Después de estudiar en la universidad; viviendo separadas en los varios semestres de sus carreras cuando la latina comenzó sus estudios en la universidad en la ciudad de Nueva York, y la rubia había decidido quedarse a estudiar en la universidad local de la ciudad donde ellas vivían, Brittany quería estudiar para ser maestra de grados de primaria y su latina la apoyaba cómo en cada decisión que Brittany hiciera feliz... Después de tantos años con altos y bajos se encontraban juntas.
La suerte para las dos había cambiado cuando una oportunidad de trabajo en la ciudad donde Santana había estudiado su carrera le abría las puertas a la rubia de los ojos más azules que el cielo, se trataba de una escuela privada en New York, al ser Brittany una de las mentes matemáticas más brillantes en el último tiempo de su universidad, fue escogida para ser no solo la maestra de los dos primeros grados en la primaria de la escuela, estaría a cargo del grupo de la escuela con los niños más listos del distrito.
La vida de aquellas dos chicas iba de manera prodigiosa, feliz y llena de mucho amor, los planes de por fin de agregar alguien a la familia había llegado a las chicas, eso incluso antes de planear una boda la que haría el proceso con los óvulos de Santana sería la rubia, quien soñaba con llevar dentro de ella el bebé fruto de su amor.
Lo que jamás esperó Brittany fue ser abandonada por su amada, cuando estaban a un paso de ser lo que tanto pensaron, después de una negativa en sus resultados, días tristes y apoyo de su morena no imaginó jamás tener que extrañarla, ¿Podría la morena haber abandonado a quien decía amar con su vida entera?, ¿Podría alguien querer acaso dañar la felicidad de estas dos mujeres, soñadoras y amorosas?
--Me pasa que me despierto a la mañana y... y lo primero que se me aparece sos vos. Y me voy a dormir, y cierro los ojos, y te me apareces vos y estoy todo el día mirando la foto de perfil tuya, como una loca --me rio de mí misma, decir eso en voz alta era patético. Martina también se rió ¿de ternura, de burla, de... amor? Este último pensamiento me hace titubear un poco antes de continuar mi declaración-- buscando... excusas... para hablarte de cualquier cosa, porque necesito estar en contacto con vos.
Se me escapa, casi inconscientemente, un suspiro de alivio, ya está, ya lo sabía, era un peso menos.
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Fanfic que narra que podría pasar luego del capítulo 36 (el último hasta la fecha)